¿A
qué apenarse tanto por las pequeñas cosas?
Guardemos el pesar para lo irreversible.
Si se olvidan los besos y marchitan las rosas,
Soportemos la vida, con ánimo apacible.
Guardemos el pesar para lo irreversible.
Si se olvidan los besos y marchitan las rosas,
Soportemos la vida, con ánimo apacible.
Vistámonos
con alas de etéreas mariposas,
Soñemos en lo alto la cumbre inaccesible,
Que dejando detrás ideas enojosas
La vida cotidiana será más accesible.
Soñemos en lo alto la cumbre inaccesible,
Que dejando detrás ideas enojosas
La vida cotidiana será más accesible.
Aceptemos
un mundo que sea conciliable;
Un solo hecho cuenta carácter trascendente:
El hecho de no ser, un día, de repente,
Y de decir adiós a todo lo mutable,
Viviendo en armonía, tratando que no estorbe
Nada de lo minúsculo, ante el girar del orbe.
Un solo hecho cuenta carácter trascendente:
El hecho de no ser, un día, de repente,
Y de decir adiós a todo lo mutable,
Viviendo en armonía, tratando que no estorbe
Nada de lo minúsculo, ante el girar del orbe.
Autor: Marilina
Rébora
Hola amiga, un poema muy real aveces los apenamos por cosas sin importancia cuando la verdad es que hay problemas muy fuerte que esos si que vale la pena amargarse y sufrir de verdad.
ResponderEliminarUn gran abrazo que tengas un lindo fin de semana querida amiga.